Entre los documentales que estoy viendo en estos días, los que más me han gustado son los que tratan de las pirámides de Egipto. Siempre he oído cierto runrún sobre este tema, pero nunca me he preocupado de investigar el misterio seriamente. No soy de los que creen que los antiguos eran menos inteligentes que nosotros, no hay más que leer la literatura de Homero o Cicerón para darse cuenta, y por esto me ha parecido que había cierto chovinismo en la gente que ponía en duda la capacidad de los egipcios para construir las pirámides.
Pero cambié anteayer de opinión al ver este documental de Enrique de Vicente. Aquí se presentan pruebas, que yo creo concluyentes, de que la tecnología usada para la construcción de las pirámides excedía con mucho las capacidades de los egipcios y de cualquier sociedad de aquel tiempo.
Voy a desglosar esas pruebas por partes para que se puedan entender mejor.
Las pirámides guardan unas proporciones matemáticas difíciles de creer. El primer científico que se interesó por tomar medidas muy exactas fue el inglés Sir William Matthew Flinders Petrie, que viajó a Egipto a finales del XIX con los instrumentos más precisos de su época y descubrió una cantidad de datos que aún hoy se están investigando.
De entrada, en la pirámide de Keops, el cociente de su apotema con respecto a la mitad de su base es el número Phi, también llamado número áureo. Si se suman los cuatro lados de la base y se dividen por el doble de la altura, se obtiene el número Pi. Los ángulos esconden el número de Euler, entre otros muchos juegos matemáticos que se siguen descubriendo a día de hoy. Se sabe también que las tres pirámides de Keops, Kefrén y Micerinos están alineadas con el Cinturón de Orión. El autor del artículo, que parece que es Jordi Solà-Soler, profesor de ingeniería de la Universitat Politècnica de Catalunya, dice: "A partir de todo lo precedente, parece que podemos extraer una sola conclusión: los arquitectos de la Gran Pirámide de Giza fueron seres extremadamente sabios, con unos conocimientos avanzados de matemáticas y de astronomía que iban mucho más allá del estándar de su tiempo, y hasta me atrevería a decir que más allá de nuestro conocimiento actual".
Pero esto no es más que el principio. Luego está la cuestión de la geodesia. La pirámide de Keops tiene una de las caras orientada exactamente al norte geográfico, con un error de 5'31'', más o menos el diámetro de una moneda de 2€ a un kilómetro de distancia. Este margen de error tan pequeño es hoy casi imposible de alcanzar, y la agrimensura actual se conforma con un error mucho mayor del 0,2%. Pero más escalofriante es el segundo dato: la pirámide de Kefrén, que está al lado, tiene también una cara orientada al norte y exactamente el mismo error: 5'31''. Ya hablando con los geólogos se concluye que lo más probable es que en estos 4.600 años haya sido la tectónica de placas la que haya producido la ligera desviación, y que al momento de su construcción el error fuese de 0'0''. Obviamente, si fueron capaces de alinear las dos pirámides tan exactamente es porque sabían dónde las querían alinear.
Viene luego la medición de las dos cámaras de la pirámide de Keops. La llamada Cámara del Rey mide exactamente 10,4797 metros de largo, y la Cámara de la Reina mide 10,4782 metros. Es un error de milímetro y medio por metro, que viene a ser lo que hoy se alcanza con prismas ópticos.
Pero es que, si se miden los cuatro lados de la pirámide, la mayor diferencia se produce entre el lado norte y sur, de 230,253 y 230,454 metros respectivamente, el error es inferior al milímetro por metro. Lo mismo pasa con los grados de angulación entre una cara y la otra, un error de un segundo cada 90º, la precisión máxima que hoy se puede alcanzar con instrumentos ópticos.
Hay que fijarse en que Keops es de la IV dinastía, y que de él sólo se conserva una figurita mal hecha de siete centímetros. En ese momento, los egipcios no conocen la rueda, que aparecerá en la XII dinastía. Las primeras miras de observación y plomadas sólo aparecen en la XVIII dinastía. Los primeros textos astronómicos, muy rudimentarios, aparecen en la XI dinastía. Los meridianos comienzan a conocerlos en la dinastía ptolemaica, invadidos ya por los griegos en el 200 a.C. Luego se les ve usando conocimientos matemáticos y astronómicos prestados por los griegos. El hierro no lo conocen hasta la XXVI dinastía.
Aparte, hay otro problema, que es la decadencia de las pirámides. A pesar de que la civilización egipcia continuó durante casi 2.500 años despúes de Keops, nunca pudieron igualar aquella construcción e incluso parecieron ir olvidando las tecnologías usadas.
De acuerdo, tenemos ya los planos y nos ponemos a tallar piedra para ir construyendo. Para obtener los grandes bloques de roca calcárea con los que formaron las gradas de las pirámides, hacían unas incisiones en las que clavaban unas cuñas de madera que luego humedecían, y al hincharse las cuñas reventaban la piedra. El problema es que esas incisiones son perfectamente cuadradas y no tienen la irregularidad que produciría el uso de un escoplo.
Para estatuas, losas y hasta ajuares domésticos, les gusta usar granito, cuarzo, pórfido o diorita, las rocas más duras que se conocen, que hasta hoy presentan problemas para trabajar con ellas.
Ved la marca que dejaron en este bloque de granito, que probablemente abandonaron porque se partió. No parece que se usara un serrucho de cobre accionado a mano:
Cualquier especialista actual sabe que una roca de diorita no se puede taladrar con un taladro convencional y hay que usar punta de diamante o de widia (aleación de acero y diamante). Estos tíos no sólo perforaban la diorita, sino que la trepanaban y la pulían, incluso para fabricarse cuencos o vasos. Se especula con una técnica de pulimentado por fricción con otra piedra igual de dura, con arena. Aunque esto pudiese explicar un pulimentado lento y penoso de superficies planas, ¿quién explica estos trabajos sobre superficies irregulares y curvas? Y lo mejor es que en dinastías posteriores ya fueron incapaces de volver a trabajar la diorita.
Ved el caso del sarcófago de Senusert III, usan un bloque de granito macizo y lo vacían dejando un hueco perfecto, con ángulos de exactamente 90º. Se hacen mediciones con láser y se ve que la superficie es totalmente lisa, la irregularidad no llega a un milímetro en cada lado, y además lo pulimentan por fuera y le rematan las esquinas:
Esto hoy no te lo hace nadie, lo que hacen es cortar unas rodajas con una sierra radial muy grande, refrigerada por agua, y luego pegar las distintas placas. Por muy fina que sea la fresadora, siempre funciona girando, y eso deja una forma curva. No se entiende para nada cómo está hecho ese sarcófago, ni mucho menos por qué se prefirió esa técnica, que parece ineficiente a nuestros ojos.
El sarcófago de Keops está cortado perfectamente a máquina, por los surcos que han dejado las cuchillas, se puede ver que cada presión del serrucho avanza 2,5 mm., y esto supera con mucho las capacidades actuales de los constructores de lápidas.
Hacen luego unas trepanaciones con una especie de taladro cilíndrico. Estos taladros hoy existen y usan acero con puntas de widia, pero avanzan cuatro centésimas de milímetro por vuelta, mientras que la máquina egipcia avanza dos milímetros por vuelta. O bien trabajaban con una presión de 2.000 kilos o tenían un instrumento cortante 50 veces más duro que el diamante. No hay hoy en día una tecnología que se acerque a esto. Petrie encontró un tarugo de pórfido blanco de la I dinastía, y después de esa fecha no se ha encontrado que trabajasen el pórfido.
Ved este documental, que es tal vez la mejor fuente que hay en internet sobre este tema.
Cuestión aparte es la escultura de Ramsés II, cuyo rostro tiene una simetría perfecta entre los dos lados. Esto sólo se ha comprobado recientemente, cuando se ha podido analizar con el ordenador. Hay un libro entero escrito sobre esto: Tecnologías perdidas del Antiguo Egipto, del ingeniero aeroespacial Christopher Dunn. Este científico tiene amplia experiencia en ese campo: además de trabajar en la industria aeroespacial diseñando instrumentos y herramientas, ha colaborado en el desarrollo de equipos de rayos láser de alta precisión usados en la fabricación y ensamblado de piezas para la aviación y motores de turbina, y ha sido jefe de proyectos en la industria metalúrgica. Dunn ha hecho más o menos lo mismo que Petrie, tomar mediciones con la mayor precisión posible, que en su caso fueron microscopios electrónicos y análisis por ordenador.
Lo que concluye Dunn es que la idea del cincelado manual es absolutamente imposible y que esas esculturas sólo se han podido hacer con sistemas de medición más avanzados que los que se poseen actualmente. Para realizar esculturas simétricas ajustadas al milímetro, aunque sobre materiales más blandos, lo que se hace hoy es modelar toda la forma en 3D y luego usar un torno manejado por el ordenador. No se comprende cómo se pudo esculpir de esa manera sobre roca, ni cómo se pudo luego pulir la superficie. Dunn invitó a los defensores de la teoría oficial a intentar esculpir con cinceles de bronce y martillitos de madera, y sólo hicieron el ridículo.
Pero, aparte de las propiedades de las cuchillas, ¿cuál era la fuente de energía? Si no se cree nadie ya que sólo usaran los brazos, ¿cómo accionaban las máquinas? Había, sin duda, una fuente de energía análoga a la electricidad o algo similar, la fuerza muscular es demasiado débil para esos materiales, y sobre todo es imprecisa.
Otra cuestión muy traída y llevada es el transporte de los bloques de piedra. Ha aparecido recientemente un papiro que explica que la cantera estaba en Tura y que transportaban las rocas en barcazas por el Nilo. Aunque hay algunos que van por ahí afirmando que Tura está a 800 km. de la Gran Pirámide, a mí me salen en el Google Maps unos 17 km. en línea recta, más o menos un kilómetro desde la cantera hasta el Nilo, unos 7 km. por el Nilo y los otros 9 km. por tierra hasta la pirámide. Parece que el papiro también dice que se construyó un canal artificial para cubrir esa última distancia con las mismas barcazas hasta las inmediaciones de la pirámide. Yo esto no lo pongo en duda, y además en este caso sí que se ha hecho una recreación con cierto éxito:
Pero hay en esa foto un problema. Como vemos, la piedra es de las pequeñas, de unas dos toneladas. Las piedras que se transportaron pesaban de media dos toneladas y media, aunque hay alguna de hasta 12 toneladas, y en la cámara mortuoria de Micerinos se han encontrado bloques de 200 toneladas. Podemos ver en la foto que la piedra está atrapada con unas cintas rojas con unas argollas de acero. Esas argollas son las que ha usado la grúa para poder levantar la piedra y situarla sobre la barcaza, y las que usará también la otra grúa para volverla a levantar y dejarla en tierra. Si en la IV dinastía no se conocían las grúas ni las poleas, y la única fuente de energía era el músculo, tienen estas personas que demostrar cómo cargarían las piedras en las barcazas, porque la teoría de los cien egipcios tirando de una cuerda no es creíble, primero porque los egipcios no podían caminar sobre el agua para poder tirar de las cuerdas, y luego porque la barcaza, al estar sobre el agua, no aguantaría el arrastre de la piedra. La única forma que se me ocurre de cargar una piedra sobre una barcaza es levantar la piedra, sostenerla en el aire y luego bajarla lentamente. Esto es lo que tienen que demostrar, no que una barcaza pueda transportar muchos kilos, eso lo sabemos desde hace tiempo.
Hay otra cuestión interesante en este tema del transporte. Sabemos que Egipto tiene decenas de obeliscos diseminados por su territorio, la gente va todos los días a fotografiarlos y tocarlos. Esos obeliscos pesan de 1.000 a 1.500 toneladas. ¿Esto también se transportó por arrastre con unas cuerdas? Pues que lo hagan, que cojan las cuerdas y nos lo demuestren.
Se han estudiado los obeliscos del templo de Luxor. Los ingenieros calculan que para su transporte en una superficie llana habría que hacer una tracción de 93.000 kilos, lo que obligaría a usar entre 25.000 y 50.000 personas si se quiere tirar con cuerdas. Ni veo espacio para esas personas, ni veo capacidad de coordinarlas a todas para que tiren al mismo tiempo sin que se formen atascos como los de los coches. Y, si hay una pendiente de unos 30º, la tracción tiene que ser el doble.
Otra cuestión similar está en la pirámide de Kefrén. Allí se ha colocado una exclusa para impedir el acceso. Esa exclusa es una losa de granito pulimentado de casi tres toneladas que funciona como una especie de guillotina. La losa está encajada en una abertura del techo, de modo que hay que levantarla a pulso para poder entrar y salir, y sobre todo para colocarla por primera vez. Pero en el espacio no caben seis personas, es un túnel muy estrecho. ¿Media tonelada por persona a pulso? Petrie, nada más vio aquello, ya dijo que sin duda habían usado máquinas cuya tecnología se desconocía.
No hay duda de que la mano de obra la puso el pueblo egipcio, se han encontrado papiros documentando incluso las causas de baja laboral, hay pinturas y grabados sobre el tema, y se ha encontrado incluso el cementerio de estos obreros, que no eran esclavos y que tuvieron un cierto reconocimiento social. No veo creíble la teoría de que las pirámides ya estuviesen de antes, aunque en el caso de la esfinge sí que hay algunas dudas. La pregunta ya no es quién construyó las pirámides, sino quién las diseñó y proporcionó la tecnología.
Hay que tener muy en cuenta las opiniones de Heródoto, que al fin y al cabo ha sido el único historiador que ha podido entrevistarse con los egipcios directamente, aunque él llegó a Egipto unos 2.000 años después de terminada la Gran Pirámide. A Heródoto le contaron lo que se decía en la tradición oral. Y esto es lo que escribe:
- Hasta el reinado de Rampsinito, según los sacerdotes, estuvo el Egipto en el mejor orden y en gran prosperidad; pero Keops, que reinó después, precipitó a los egipcios en total miseria. Primeramente, cerró todos los templos y les impidió ofrecer sacrificios; ordenó después que todos trabajasen para él. Los unos tenían orden de arrastrar piedras desde las canteras del monte Arábigo hasta el Nilo; después de transportadas las piedras por el río en barcas, mandó a los otros recibirlas y transportarlas hasta el monte que llaman Líbico. Trabajaban por bandas de cien mil hombres, cada una tres meses. El tiempo en el que penó el pueblo para construir el camino para conducir las piedras fue de diez años; y la obra que hicieron es a mi parecer no muy inferior a la pirámide, pues tiene cinco estadios de largo (888 metros), diez brazas de ancho (18 m) y ocho brazas de alto (14 m) en su mayor altura, y está construida de piedra labrada y esculpida con figuras. Diez años, pues, pasaron para construir ese camino y las cámaras subterráneas en el cerro sobre el que se levantan las pirámides, cámaras que dispuso para su sepultura en una isla, formada al introducir un canal del Nilo. Para construir la pirámide, se emplearon veinte años; es cuadrada, cada lado es de ocho pletros de largo, tiene otros tantos de altura, de piedra labrada y ajustada perfectamente; ninguna de las piedras es menor de treinta pies.
- La pirámide se construyó de este modo: a manera de gradas, que algunos llaman adarves y otros zócalos. Hechos así el comienzo, levantaron las demás piedras con máquinas formadas de maderos cortos, que las alzaban desde el suelo hasta la primera hilera de las gradas; cuando subían hasta ella la piedra, era colocada en otra máquina levantada sobre la primera grada, y desde ésta era levantada hasta la segunda hilera por otra máquina. Porque había tantas máquinas como hileras de gradas, o bien la misma máquina, siendo una sola y fácilmente transportable, la irían llevando de grada en grada, cada vez que descargaban la piedra: demos las dos explicaciones exactamente como las dan ellos. La parte más alta de la pirámide fue labrada primero, después labraron lo que seguía y por último la parte que estribaba en el suelo y era la más baja de todas. En la pirámide está anotado con letras egipcias cuánto se gastó en rábanos, en cebollas y en ajos para los obreros; y si bien me acuerdo, al leerme el intérprete la inscripción, me dijo que la cuenta ascendía a mil setecientos talentos de plata.
Entonces, según Heródoto, y según la tradición del pueblo egipcio, se usaron "máquinas" para ir colocando los bloques de piedra. Esas máquinas actuaban a modo de grúas, pero ¿con qué fuente de energía? ¿Con qué tecnología? Esta cuestión es muy divertida, porque durante décadas hemos estado viendo muchos dibujos de egiptólogos que dicen que se arrastraban las piedras por rampas de tierra, con unos tronquitos en el suelo. ¿No leen lo que está diciendo Heródoto? Dice que se usaron máquinas, no lo puede decir más claro.
El ensamblado de todos los bloques de piedra no es una cuestión menor, porque aquí también se desafía la tecnología actual. Los grandes bloques de varias toneladas encajan perfectamente, a veces no se puede meter ni una hoja de afeitar. Ha hablado antes Heródoto del "labrado" de la pirámide, esto eran unas losas de piedra blanca que recubrieron toda la pirámide, de las cuales sólo quedan algunas en la base y la cúspide, porque el resto las han ido robando. Se calcula que eran 27.000 las losas del recubrimiento de la Gran Pirámide, con una superficie de algo más de tres metros cuadrados cada una y aristas de unos dos metros. Estudiando su forma, se ve que tienen un paralelismo de cinco centésimas de milímetro. Pero lo mejor es la forma en la que se ensamblaron: entre una placa y otra sólo hay medio milímetro, y se usó yeso de rápido fraguado, es decir, que había que colocar la placa bien a la primera. Hoy, las mejores construcciones consiguen ensamblar las losas con juntas de un milímetro como mínimo. Lo mismo ocurre con el paralelismo a lo largo de las caras de la pirámide: cada lado tiene 200 metros, y su error es inferior a las tres centésimas de milímetro, por debajo de la mejor tecnología actual, que usa el láser. Y lo mismo sucede con la angulación de 90º en las esquinas.
Se puede poner como ejemplo otra obra faraónica de la actualidad, el Valle de los Caídos. Se ha elogiado muchas veces la obra escultórica megalítica de Juan de Ávalos, especialmente en la obra llamada La Piedad. Ved cómo ensambla Juan de Ávalos los bloques, con juntas de hasta un centímetro. Puede que actualmente esto se pueda mejorar, pero usando instrumentos mucho más complejos que tallen cada bloque con una extrema precisión.
En resumen, la forma de tallar, manipular y ensamblar las piezas de las pirámides no se conoce, no valen excusas ni recreaciones ridículas, no se tiene ni idea de cómo esto se hizo.
Éste es el aspecto que tenía la Gran Pirámide antes de que se saqueara el recubrimiento, con la piedra angular ("piramidión") en aleación de oro y plata:
Son muy conocidas las otras pirámides que hay por el mundo, como el Templo de Kukulcán o la Pirámide del Sol, en América. Estos templos no tienen el grado de perfección de las pirámides de Egipto, aunque sí mantienen la orientación al norte de una de sus caras y las proporciones en torno al número Pi. Es interesante también el tallado de las piedras de los incas, con leyenda incluída. Ensamblaban los muros como si jugasen al Tetris:
Está claro que, con estas pruebas, la egiptología se cae completamente y tenemos que aceptar que gran parte de lo que hemos estudiado en las facultades de Historia acerca del mundo antiguo puede ser falso. Los defensores que aún quedan del progreso lineal de la Historia parecen ya equilibristas más preocupados por ir inventando falacias para negar las evidencias que de investigar nada.
Para mí, no hay duda de que los egipcios usaron tecnologías muy avanzadas que escapaban a su comprensión, no digo que no construyesen las pirámides, creo que aportaron la mano de obra, pero sí que digo que el diseño, la dirección de la obra y el aporte de las herramientas corrió de parte de otra civilización superior que luego desapareció.
No pienso que la tecnología usada la pudiesen los egipcios comprender, por dos razones:
La mejor tecnología la usan en la IV dinastía, aunque su civilización llegó a tener 30 dinastías a lo largo de 2.500 años después de acabada la Gran Pirámide. Es claro que, con los años, van perdiendo el control y el uso de esas herramientas y esos conocimientos matemáticos y geodésicos. Ninguna civilización que haya tenido conocimientos creados por ella misma los ha llegado a perder, siempre los ha legado a sus descendientes.
Esas tecnologías avanzadas las usan únicamente en las pirámides, en el resto de sus construcciones y actividades no aparecen.
Por tanto, aquí sólo caben dos interpretaciones:
La existencia de una civilización humana más avanzada incluso que la actual que desapareció por algún tipo de catástrofe climática, bélica o pandémica.
La intervención de una civilización extraterrestre.
Hay algunos defensores de esta teoría desde hace mucho tiempo, aunque no haya aparecido ninguna prueba convincente.
En este vídeo, por ejemplo, se defiende esta idea de la civilización prehistórica poniendo ejemplos como la llegada del ser humano a Australia hace 50.000 años, y luego su paso a América hace 12.000 años. También habla de la datación de la Gran Esfinge, que los geólogos sitúan ahora en el 10.000 a.C., aparte de otro ejemplo irrelevante como el mapa de Piri Reis, que data de 1513. El único ejemplo que puede tener interés en ese vídeo es esta gráfica, que representa descubrimientos genéticos recientes:
Lo que ahí se representa son dos evoluciones divergentes del cromosoma Y, que identifica la línea paterna, y el ADN mitocondrial, que representa la línea materna. Los gráficos lo que vienen a demostrar es que hace 10.000 años el número de madres era 17 veces mayor que el número de padres. Este fenómeno se comenzó a producir bruscamente y duró unos 2.000 años. Esto no hace que la población baje sustancialmente, aunque sí que se estanque su crecimiento. Para esto, hay varias teorías, aunque desde luego que la de las catástrofes naturales y la consiguiente desaparición de civilizaciones avanzadas sería la menos coherente. Es claro en ese gráfico que hay unos pocos hombres que fecundan a todas las mujeres, y esto puede deberse a la extensión de la poligamia o al uso de un sistema de macho alfa en las tribus. El problema que yo veo es que el fenómeno parece producirse en todas las culturas al mismo tiempo, en sociedades que estaban completamente incomunicadas, por lo que dudo de que fuese precisamente en ese momento cuando se les ocurrió a todos comenzar a usar la poligamia de manera tan exagerada, pienso que la poligamia se usaba desde siempre y que en general las tribus no dejaban mujeres sin fecundar, por razones obvias. Por tanto, si se excluye el cambio cultural, lo único que nos queda es un evento de extinción masiva masculina, y ese evento no me parece que se debiese a catástrofes naturales, porque en ese caso las mujeres habrían fallecido igualmente, ni me parece que se debiese a una guerra mundial, porque el continente americano estaba completamente aislado, y también participa de la extinción masculina. De hecho, había cientos de culturas repartidas por el mundo completamente incomunicadas. Luego daré otra interpretación sobre este asunto.
Por tanto, la teoría de una civilización prehistórica muy avanzada no tiene ninguna prueba más que la imaginación, el mito de la Atlántida, un continente perdido en medio del Atlántico que se habría hundido. Ese continente nunca existió porque los satélites han hecho ya mapas del fondo de los océanos y se ha visto que no hubo nada de nada. Se piensa que la Atlántida era, simplemente, un pueblo de Cádiz, y que las referencias de Platón acerca de que se hundió en un día tenían que ver con un maremoto que la dejó enterrada hasta hoy.
No me parece posible que una civilización avanzada pueda desaparecer sin dejar rastro. Si sabían construir pirámides como la de Keops, no hay terremoto, ni inundación, ni impacto de cometa que pueda tumbar eso. Habríamos encontrado ya restos de esa civilización, sin ninguna duda.
Sólo se me ocurre un motivo para defender esta teoría, que es el miedo a aceptar la hipótesis extraterrestre por ese pequeño estigma social que conlleva.
Esta teoría aparenta ser menos científica, pero es la única que puede aportar pruebas documentales y una interpretación totalmente coherente. Por pruebas documentales, me refiero a toda la cantidad de vídeos e informes oficiales del Pentágono, aparte de otros que van saliendo. Por cierto, que el vídeo que mostré hace poco a todo color con un OVNI de tipo Tic Tac ha sido borrado misteriosamente del YouTube. Lo digo porque pruebas documentales hay bastantes, y aparte las que van borrando.
Entonces, entendiendo que una civilización alienígena no se tiene que haber desarrollado al mismo ritmo que la nuestra, y que puede estar desarrollada desde hace millones de años, y teniendo en cuenta que el mismo Luis Elizondo, que es la fuente de mayor credibilidad en este tema, ha afirmado que, entre el material clasificado que él ha visto y que no se puede divulgar, hay fotos de OVNIs que muestran a sus ocupantes, pues yo concluyo que nadie va paseando platillos volantes por un planeta sin bajarse, tomar muestras y, posiblemente, llevarse a alguno.
Pero, antes de entrar a interpretar de la manera más coherente posible todo este entramado de misterios, voy a acumular todavía dos preguntas más:
¿Quiénes son esos tíos que los egipcios representan con cabezas de animales, como por ejemplo Horus, el primer faraón, que tenía cabeza de halcón, o Anubis, con la cabeza de un chacal? Lo digo porque en las pinturas aparecen estos señores interaccionando física y directamente con los egipcios, no como un ángel dibujado allá en los cielos, sino a veces incluso tocando a las personas, porque de hecho su cuerpo es el de una persona.
Y la segunda pregunta que hago es: ¿quién es Osiris? Coño, es un tío de color verde con el cabezón apepinado:
Según Plutarco, Osiris fue el primer monarca de Egipto y el que les enseñó la agricultura, la pesca y la religión, aparte de crear el primer cuerpo legislativo.
Y comparemos esto con esta estatuilla presumeria de la cultura de Ubaidian, de hace 7.000 años:
Pues todo esto, que parece inconexo, tiene una única explicación, lo que ocurre es que es una explicación sólo apta para "rojopastillados" y mentes abiertas. Los señores científicos guardianes de las ortodoxias y el sentido común que no sigan leyendo.
Resulta que, dentro de los documentos de nuestros amigos de UMMO, de los que he hablado hace muy poco, hay unas cuentas de Twitter que están publicando información en los últimos años.
La cuenta más interesante se llama @312_oay (alph⍺𞤁ᴑmega), y tiene los tweets recopilados en la web de Ummo-ciencias.org. Interesantes también los comentarios que publica el usuario Pepetmurri en un PDF aparte.
En esa cuenta se explica la prehistoria humana de manera muy diferente a lo que nos hemos estado imaginando, incluso publican un resumen gráfico muy divertido:
Os hago un pequeño resumen:
Los primeros extraterrestres llegaron a la tierra hace 35.000 años, procedentes del Cinturón de Orión. Esta gente tiene aspecto reptiliano, sobre todo por el color verdoso y la piel escamosa, pero son mamíferos humanoides. Su aspecto coincidiría con la estatuilla de la gente de Ubaidian, y Osiris habría sido uno de ellos, incluyendo su color verde. De siempre, les gustó hacer experimentos con nuestro ADN, tanto en la Tierra como en sus planetas, mezclando animales y personas. Son, desde hace millones de años, una de las civilizaciones más fuertes de la galaxia y tienen varias civilizaciones subordinadas y multitud de planetas bajo su dominio.
Una de las civilizaciones subordinadas recibió autorización de estos reptilianos para venir a la Tierra a obtener humus, con la idea de llevarlo a planetas tipo Marte, ya sin vida, y reflotarlos. Esto sucedió hace unos 22.000 años. Esta civilización subordinada no encontró otra forma para obtener el humus que esclavizar al homo sapiens, al que ve como un animal más, y mandarlo cargar unos contenedores que ellos fabricaron. Para facilitar la tarea, provocaron lluvias artificiales y canalizaron el barro con unos canales construidos ex profeso. Luego liofilizaron el barro y se lo llevaron con las naves. Aquí es donde se produce la reducción de las líneas genéticas masculinas, bien por estar los hombres separados físicamente de las mujeres como esclavos, bien por haber muerto o haber sido asesinados por estos seres.
A partir del 4.500 a.C., los reptilianos consideran que esta civilización subordinada ha actuado indebidamente con nosotros, o bien creen que ya se han obtenido suficientes recursos, y vuelven a tomar el control de la Tierra para liberar a la Humanidad, con un sentido de reparación. Ahí es cuando aparece Osiris para fundar el Antiguo Egipto, de modo que la Gran Pirámide sería una especie de regalo, lo mismo que la tecnología de la agricultura, fundición del hierro, etc. La Tierra queda "bajo custodia", es decir, que estos reptilianos impiden hasta el día de hoy que otras civilizaciones alienígenas vuelvan a interferir en nuestro desarrollo. También, antes de marcharse, borraron las huellas e hicieron desaparecer tanto sus representaciones gráficas como su tecnología.
Esta interpretación no sé si es cierta o no, es lo que declara la web de UMMO. Si algún día los de UMMO salen y dan la cara, entonces habrá que creer sus informes, mientras tanto sólo se puede entender esto como mera hipótesis muy imaginativa. Aunque sí que reconozco que esta historia sería coherente con todos los datos de los que disponemos.
De modo que reitero mi conclusión de que las pirámides las construyó el pueblo egipcio, pero usó tecnología proporcionada por alienígenas. Es una opinión con pocos seguidores actualmente, pero es la que tengo.
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